El Cinco de Mayo en los Estados Unidos, a menudo se confunde con el Día de la Independencia de México, que en realidad es el 16 de septiembre. En esa fecha en 1810, México declaró su independencia del dominio español.
En Estados Unidos, el Cinco de Mayo ha evolucionado hasta convertirse en uno de los días festivos para beber más grandes del país. En 2013, se vendieron más de $ 600 millones de dólares en cerveza, según datos de Nielsen, que es más cerveza de la que se vende para el Día de San Patricio o el Super Bowl, dos días festivos donde el consumo de cerveza es el punto focal principal. Y la mayor parte de esa cerveza es de origen mexicano, lo que también ha significado que el sector cervecero mexicano, gracias al Cinco de Mayo, haya seguido creciendo y prosperando al norte de la frontera, experimentando el mejor crecimiento del sector en el mercado estadounidense según datos de EuroMonitor., solo superada por el rápido crecimiento de la cerveza artesanal estadounidense.
Basta decir que el Cinco de Mayo es un gigante en lo que respecta a la venta de bebidas alcohólicas, pero ¿cómo se convirtió una festividad que ni siquiera se celebra en México? no solo la festividad más poderosa de los Estados Unidos cuando se trata de vender alcohol, sino también la única conexión que la mayoría de los estadounidenses tienen con nuestro grupo de inmigrantes más grande. Puede agradecer a los distribuidores de Corona en Texas en la década de 1980.
El Cinco de Mayo conmemora una batalla oscura, la batalla de Puebla de 1862, a unas 80 millas de la Ciudad de México, cuando un grupo de combatientes mexicanos superados en número de alguna manera pudo derrotar al ejército francés, aunque la victoria duró poco, ya que menos de un año más tarde, las tropas mexicanas fueron rechazadas y la ciudad de México finalmente fue capturada.
La festividad originalmente ganó importancia en Estados Unidos gracias al creciente impulso por los derechos civiles mexicano-estadounidenses en las décadas de 1940 y 1950. El movimiento chicano se formó en la década de 1960 con el objetivo declarado de empoderar a los mexicoamericanos para que abrazaran su herencia cultural, y celebrar el Cinco de Mayo se convirtió en una herramienta útil para conectar a estos nuevos ciudadanos con la historia de Estados Unidos en su conjunto.
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| Celebración del Cinco de Mayo en la década de 1960 en Los Ángeles. Cortesía de LA Public Library. |
Sin embargo, aunque la festividad ganó popularidad entre los inmigrantes mexicanos en los años 60, 70 y 80, se mantuvo relativamente aislada. Si bien más mexicoamericanos comenzaron a celebrar la festividad como una forma de abrazar la conexión entre la cultura mexicana y estadounidense, la mayoría de los otros grupos estadounidenses no tenían idea de que existía la festividad. Pero en 1989, el Grupo Gambrinus con sede en San Antonio, que eran los importadores regionales de Corona y Grupo Modelo, lanzó un anuncio temático del Cinco de Mayo alentando a los mexicano-estadounidenses que ya estaban celebrando la festividad a convertir en una prioridad en este día beber cerveza mexicana. La campaña despegó.
Lo que ocurrió en solo ocho cortos años fue que la festividad se solidificó más como un momento para beber Corona que como un momento para reconocer la profunda conexión que comparten Estados Unidos y México. Para 1996, consumir Corona como una forma de celebrar el Cinco de Mayo era la forma principal en la que la mayoría de la gente reconocía la existencia de la festividad, una gran victoria para los comercializadores de Corona. Ese año, el gerente de marketing de Gambrinus, Don Mann, dijo: "Corona es lo primero que les viene a la mente cuando los clientes piensan en el Cinco de Mayo".
A medida que la festividad ha ganado popularidad, su conexión con el significado original ha continuado debilitándose, mientras que su excusa para festejar ha aumentado drásticamente. Mucho de esto tiene que ver no solo con el hábil marketing de compañías como Corona, que gastan $ 1 en promociones del Cinco de Mayo por cada caja de cerveza vendida, sino también con la época del año en la que cae la festividad.
A principios de mayo significa el verdadero comienzo de la primavera en la mayor parte de Estados Unidos, justo cuando el clima se está volviendo agradable y con el Día de los Caídos a casi cuatro semanas de distancia, muchos estadounidenses buscan cualquier excusa para estar afuera celebrando bajo el sol. Según The Wall Street Journal, la diferencia en el gasto de los estadounidenses en un fin de semana normal en comparación con un fin de semana festivo puede ser de hasta $ 500 millones, por lo que hacer un gran negocio con el Cinco de Mayo es bueno para los negocios. Agregue eso al hecho de que la mayoría de los estadounidenses asocian la cocina mexicana con el clima cálido, y usted tiene la combinación perfecta para una fiesta épica. Todo lo que la mayoría de los vendedores de alcohol deben hacer en este punto es simplemente agregar un poco de combustible al fuego.
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